No se trata de imitadores, ni mucho menos. Se trata de estupendos realizadores y guionistas que han realizado su trabajo bajo el manto del cine X con un claro espíritu mainstream, cineastas que bien habrían podido trabajar en el cine convencional con considerable éxito y que se han convertido en flamantes realizadores de culto en la industria porno actual.
Michael Zen/David Lynch
Filmes de Lynch como “Mullholland Drive”, Dune o la serie “Twin Peaks” dan clara muestra del estilo de un cineasta que inauguró su obra con un filme inclasificable, “Cabeza Borradora”. En el caso de Zen estas características son igualmente visibles en filmes como “Sátiro”, “Blue Movie” o “Falconhead 2: The Maneater”. Surrealismo, una puesta en escena impactante y turbadora y una utilización onírica de la banda sonora, la iluminación, el vestuario y la escenografía. Cine de autor a uno y otro lado de la fina línea que separa hoy en día ambas industrias.
Brad Armstrong/Steven Spielberg
A Armstrong, se le puede considerar el más claro creador de las superproducciones pornográficas y el cine argumental actual. Siempre bajo la cobertura que le proporciona Wicked Pictures (aún no tiene una gran productora propia como Spielberg), Armstrong ha creado grandes producciones pornográficas de todo tipo de géneros: “Conquest” (aventuras), “Flashpoint” (drama/acción), “Dream Quest” (fantasía), “Lovers Lane” (thriller), “Euphoria” (ciencia ficción), “Manhunters” (acción), “One man’s obsesión” (thriller/comedia), “Falling from Grace” (drama), “The Closer” (comedia), “Coming Home” (drama/bélico)… todos grandes éxitos sustentados por cuidados guiones del propio Armstrong que lleva a la pantalla con gran acierto.
Nic Andrews/Michael Bay
“Pearl Harbour”, “Armageddon”, “La Roca” o “Transformers” de Michael Bay, y “Dark Angels” (I y II), “Stripped” o “No Limits” de Nic Andrews son claros ejemplos de su cine. Incluso, sus obras más célebres comparten temática: “Dos policías rebeldes” (de Bay, con Will Smith y Martín Lawrence) y “Loaded” (de Andrews, con Barrett Blade y Eric Masterson) son buddy movies policíacas donde la acción, la velocidad, el humor y la espectacularidad constante y el final in extremis componen películas que, pese a no ser dramas profundos ni el tipo de historias que suelen seducir a críticos y académicos, no tienen desperdicio y están predestinadas al éxito.
Paul Thomas/Martín Scorsese
“Toro Salvaje”, “Taxi Driver”, “Infiltrados”o “El color del dinero” son ejemplos del cine de Scorsese, de la gran construcción de personajes y de los guiones minuciosos para tratar los temas con profundidad. Así, en el caso de Paul Thomas, “Heart of Darkness”, “The Masseuse” o “The new devil in Miss Jones” son claros ejemplos de como el mejor y más profesional cine se puede tratar bajo los criterios de producción de una industria como la pornográfica.
Sin duda, estos no son los únicos directores de cine porno cuya obra recuerda y puede compararse con el cine convencional. Michael Ninn, Michael Raven, Andrew Blake, Jonathan Morgan, Eli Cross… Cada vez más (y como ya fue en sus inicios en los años 70), el cine pornográfico y el convencional se están aproximando y juegan codo con codo en el terreno del entretenimiento y el arte cinematográfico.